Consejos para no tener caspa en el cabello y poder seguir su día sin sentirse incómodo.
Para algunos, se trata de la afección estética más molesta. Para otros, representa una pesadilla crónica de la que no se saben librar. La caspa o descamación anormal del cuero cabelludo es una de las afecciones más habituales de la piel y ocupa el primer lugar entre los padecimientos del cuero cabelludo. Más común en hombres que en mujeres, debido a la acción de sus hormonas que generan más grasa en la piel, puede ser causada por producción excesiva de ésta, falta de higiene, deficiencia de zinc, cambios hormonales en la adolescencia o por un hongo microscópico, llamado pityrosporum ovale. En cuanto el microorganismo se instala, utiliza la grasa del cuero cabelludo como alimento y tiende a reproducirse rápidamente en pocos días. Y entonces llegan la irritación del cuero cabelludo, la picazón constante y la presencia de escamas.
Para tratarla, las compañías de cosméticos han desarrollado champúes especialmente formulados para restablecer el equilibrio del ciclo de regeneración de la piel y erradicar hongos. Contienen fungicidas, alquitrán, ácido salicílico o ketoconazol. “La ciclopiroxolamina es el principio activo más efectivo: resulta menos agresivo para el cuero cabelludo y está recomendado para casos de caspa moderada”, afirma la doctora Mónica Garfinkel, dermatóloga del Hospital Pirovano, de Buenos Aires.
El champú anticaspa debe utilizarse todos los días, al menos durante una semana, para poder observar resultados. Luego, lo ideal es consultar al dermatólogo para chequear resultados utilizándolo o no. Es importante saber que la caspa puede ser muy resistente y que no se cura por completo, de modo que aparece de manera cíclica. Al respecto, la doctora Garfinkel opina: “Tal como dijo un prestigioso dermatopatólogo, la caspa es fisiológica. Pretender eliminarla es igual que pretender eliminar la saliva”.