Si bien recurrimos a los medicamentos en busca de alivio, a veces, el remedio es peor que la enfermedad…
Muchos de los medicamentos y suplementos con y sin receta pueden hacer que el esfínter esofágico inferior no se cierre bien. Entre ellos se incluyen antibióticos, antidepresivos, bloqueadores de los canales de calcio, analgésicos opiáceos como la codeína y la hidrocodona, los medicamentos contra la osteoporosis, sedantes y tranquilizantes como así también los analgésicos y suplementos de venta sin receta como el hierro, el potasio y la vitamina C.
Si sufre de acidez o reflujo gastroesofágico, consulte con su médico si alguno de estos medicamentos podría estar contribuyendo con el malestar y si debería cambiarlos por otros.
Por otra parte, según una importante encuesta sobre la salud, las personas que tomaban somníferos, como benzodiazepinas (diazepam, alprazolam y triazolam) eran un 50 por ciento más propensas a sufrir reflujo gastroesofágico por la noche que aquellas que no tomaban ningún medicamento. Otro estudio reveló que estos medicamentos debilitan el esfínter esofágico inferior y disminuyen las posibilidades de tener una buena noche de descanso.