El jengibre es tan versátil que ¡hasta puede preparar un vodka con él! Descubra más ideas originales para darle variedad y más sabor a sus platos.
1 Vodka de jengibre:
Pele un poco de jengibre y trócelo. Añádalo a un frasco con vodka y guárdelo un par de semanas en la heladera. Por una parte, tendrá un vodka que combina genial con miel y un toque de naranja, y por el otro, conservará su jengibre fresco, que luego podrá usar para cocinar.
2. Infusión refrescante:
Esta infusión de jengibre se toma fría, con limón y azúcar, y es ideal para alejar el calor, hidratarte y tomar algo rico y distinto.
3. Sirope de jengibre:
Combine en un sartén dos tazas de azúcar, una taza de agua, y rebanadas de jengibre fresco al gusto (recomendamos una cucharada y media). Cocine a fuego alto removiendo hasta que el azúcar se disuelva y luego deje hervir y cocine un par de minutos más. Úselo con helado, café, o lo que guste.
4. Jengibre en conserva:
Así como el de los restaurantes japoneses, prepárelo en tu casa colocando una taza de vinagre de arroz, 1/4 taza de azúcar y dos cucharaditas de sal en un sartén. Cuando esto hierva, añada una taza de jengibre fresco pelado y rebanado. Deje cocinar a fuego medio-bajo por media hora y luego deje que alcance temperatura ambiente y guarde en un frasco esterilizado.
5. Pollo estilo asiático:
Pique en tiras delgadas una cebolla morada pequeña; saltee en aceite de sésamo mezclado con oliva. Añada el pollo en tiras finas y a media cocción, vierta un chorro de miel. Sazone con salsa de soja y teriyaki, un toque de jengibre y una pizca de curry. Espolvoree con ajonjolí y sirva sobre un colchón de arroz o con tallarines.
(Fuente: elgourmet.com)