Después de la pandemia, se multiplicaron las consultas por
salud mental en todo el mundo.
Desde fantasear con el suicidio (o intentarlo), hasta la
depresión y el trastorno bipolar, pasando por los sufrimientos mentales
gatillados con el uso de sustancias psicoactivas (marihuana, anfetaminas, LSD,
etc), el malestar psíquico se ha incrementado en los últimos tres años. Sin
duda, parte no poco importante de ello se debe a las secuelas de la pandemia de
COVID-19.
Por qué motivos de salud mental se consulta más
En esta nota su mirada irá al detalle mismo de las
patologías por las que se acude a los centros asistenciales, entregando una
serie de consejos de autocuidado. Respecto a las primeras, la profesional refiere
que, “si tenemos que posicionar (de mayor a menor) los principales trastornos
por los que asisten las personas a los centros asistenciales del sistema público,
estos se pueden agrupar en cuatro categorías”.
Un primer grupo lo integran los trastornos neuróticos,
trastornos relacionados con el estrés y trastornos somatomorfos, incluido
el trastorno de pánico. Aclara, que son diferentes tipos de problemas de salud
mental.
• Trastornos neuróticos: los trastornos neuróticos,
a menudo llamados trastornos de ansiedad, son problemas en los que las personas
experimentan niveles elevados de ansiedad o preocupación excesiva en su
vida cotidiana. Esto puede incluir trastornos como la ansiedad generalizada,
en la que alguien se siente ansioso la mayor parte del tiempo, o el trastorno
de pánico, donde las personas tienen ataques repentinos de miedo intenso y
físicos, como palpitaciones y dificultad para respirar.
• Trastornos relacionados con el estrés: estos
trastornos ocurren cuando el estrés y las tensiones de la vida cotidiana se
vuelven abrumadores y causan problemas de salud mental. Por ejemplo, el
trastorno de estrés postraumático (TEPT) puede desarrollarse después de
experimentar un evento traumático, como un accidente o un abuso.
• Trastornos somatomorfos: los trastornos somatomorfos
son condiciones en las que las personas experimentan síntomas físicos reales,
pero no pueden encontrar una causa médica subyacente. Estos síntomas a menudo
están relacionados con el estrés o la ansiedad. Por ejemplo, el trastorno de
somatización implica experimentar múltiples síntomas físicos sin una causa
médica aparente.
Consumo de sustancias psicoactivas
Luego, en segundo lugar, tenemos los trastornos mentales
y del comportamiento debidos al uso de sustancias psicoactivas. “Estos
ocurren cuando alguien consume drogas, alcohol o sustancias que afectan su
mente y comportamiento. Pueden comenzar con una intoxicación aguda, que es
cuando alguien consume una gran cantidad de la sustancia y experimenta efectos
inmediatos”.
Con el tiempo, estas personas pueden desarrollar una
adicción o dependencia a la sustancia, lo que significa que sienten la
necesidad de consumirla regularmente. Esto puede llevar a problemas más
graves, como síntomas de abstinencia cuando intentan dejar de consumir la
sustancia. sustancias psicotrópicas también pueden experimentar trastornos mentales
como la psicosis, que altera su percepción de la realidad”. Como sabemos, se
trata de problemas pueden estar relacionados con otros problemas de salud, con
la familia y con la sociedad en general, lo que dificulta, en ocasiones su
tratamiento.