Pruebe con estos consejos si quiere mantener la habitación
de sus hijos ordenada sin morir en el intento.
Fuente: Thespruce.com
Piezas de rompecabezas en el piso. La biblioteca convertida
en un depósito de cualquier cosa, y el canasto de los juguetes, en una bolsa de
trastos. ¿Por dónde empezar? La colaboración de los niños es imprescindible
para mantener sus espacios en buenas condiciones. En este artículo del
portal Thespruce.com, encontrará algunas estrategias útiles para conseguirlo.
¿Necesita usar un traje de protección contra materiales peligrosos para entrar
al dormitorio de sus hijos? A continuación, ideas para motivarlos a cuidar sus
espacios.
Ayude a sus hijos a ordenar
Si se trata de niños pequeños, ayúdelos. Intervenga en el
proceso de manera que no sientan que ordenar es una misión imposible de lograr
para ellos. No hay dudas de que es mucho más fácil (y más divertido) hacer
lío que ordenarlo. A veces los niños solo necesitan un poco de ayuda para
ponerse en marcha y completar la tarea.
Deles instrucciones
Los adultos suelen gritar irritados: “¡Ordena tu
habitación!”. Y, obviamente, los niños saben qué aspecto debe tener una
habitación cuando está limpia y ordenada, pero ¿saben cómo llegar a ese
resultado? El adulto debe darles indicaciones para que puedan incorporar el
hábito de reconocer qué es preciso hacer para lograr que sus espacios estén en
condiciones. Al principio tal vez sea necesario sentarse en la habitación
con ellos y decirles que levanten y ordenen sus libros. Cuando hayan terminado,
siga con otra indicación, por ejemplo: “Lleven la ropa sucia al canasto de ropa
para lavar”.
Asígneles tareas concretas adecuadas a la edad
Sería genial que su hijo de dos años pudiera pasar la
aspiradora por su habitación y así reducir la lista de quehaceres domésticos
pendientes, pero esa no es una idea realista. Es preciso asignar a los niños
tareas apropiadas para su edad que efectivamente puedan hacer. Hasta los más
pequeños pueden ayudar. Los niños de dos o tres años pueden limpiar el polvo de sus habitaciones con ayuda de un par de medias colocadas en sus manos.
Los niños de cuatro o cinco años pueden comenzar a aprender a hacer sus camas.
Sus hijos pueden hacer muchas cosas en apenas 20 minutos, como afirma este
artículo de Thespruce.com. Solo debe ser paciente con ellos y asegurarse de
asignarles tareas que efectivamente puedan completar.
Prepare una lista de control
Cuando los niños puedan leer, prepare una lista de
control paso a paso donde detalle lo que deben hacer y luego indíqueles que,
cuando terminen una tarea, la marquen como completada. También puede usar
este sistema con niños más pequeños. Solo tendrá que ilustrar lo que deben
hacer. Por ejemplo, garabatee un osito de peluche sentado sobre el canasto de
juguetes para mostrarles que deben levantar todos los juguetes que estén fuera
de su lugar.