Más allá de la limpieza habitual, hay ciertos utensilios y
sectores de la cocina que parecen nunca quedar del todo limpios. Aprenda cómo
vencerlos y tener una cocina impoluta.
La jarra del café tiene un desagradable residuo marrón
UTILICE
HIELO, SAL Y LIMÓN. La jarra de vidrio que traen las cafeteras puede cubrirse rápidamente
con un horrible sedimento marrón, especialmente si la deja llena de café durante
períodos prolongados. La solución más rápida es mezclar hielo, sal y limón.
1.
Llene una cuarta parte del recipiente vacío con hielo.
2.
Corte el limón en cuatro y exprima dos gajos en el recipiente.
3.
Agregue 2 cucharadas de sal. Revuelva la mezcla en el recipiente durante dos
minutos y la superficie interior quedará inmaculada. Enjuague con agua.
La salsa de tomate tiñó un recipiente plástico
DÉJELO
BLANQUEAR AL SOL. Simplemente tome el recipiente plástico manchado —ese que
estuvo en la heladera durante una semana con la salsa de los fideos— y llévelo
a la zona del patio o del jardín que reciba más luz del sol. El balcón de un
departamento o incluso una ventana luminosa pueden servir. Deje el recipiente
allí todo el día. Cuando lo retire al atardecer, la mancha habrá desaparecido y
el recipiente plástico lucirá como nuevo. Lo más difícil de este método para
limpiar recipientes de plástico es creer que algo tan sencillo realmente
funcione. Pero el sol es un gran blanqueador para las manchas de tomate, que
son precisamente las manchas que a veces no se quitan. De hecho, las remeras y
los manteles manchados con salsa de tomate también se blanquearán si los seca
al sol después de lavarlos.
USE
UN POCO DE LAVANDINA. Por supuesto, en algunas regiones pueden pasar meses sin
días de sol. En ese caso, la lavandina es la mejor opción. Llene el recipiente
con agua y el contenido de una tapa de lavandina de uso doméstico y deje actuar
al menos una hora. La mancha desaparecerá después del enjuague, incluso de los
recipientes más deteriorados. El sol y la lavandina también son útiles para
limpiar espátulas plásticas de color blanco. Sin embargo, recuerde que
generalmente están hechas de goma; por lo tanto, no las exponga durante mucho
tiempo al calor intenso.
No se quita la comida quemada de la olla
HIERVA
Y DEJE EN REMOJO. La forma más fácil de quitar la comida quemada es llenar la
olla con agua y un poco de detergente. Haga hervir el agua, apague el fuego y
deje actuar durante al menos 15 minutos. La comida quemada estará lo
suficientemente blanda y podrá despegarla raspando con una espátula de plástico.
Luego refriegue el fondo hasta que quede limpio.
Si
el tratamiento no funciona la primera vez, intente nuevamente. Si la comida se
ha pegado mucho, podría necesitar hasta tres hervores. Para un mayor efecto,
agregue 2 o 3 cucharaditas de sal al agua. O agregue una cucharada de vinagre.
No sale el queso del rallador
USE
UN CEPILLO DE DIENTES VIEJO. Éste puede ser un tedioso desafío si se trata de
queso o de ralladura de limón, especialmente en los agujeros más pequeños del
rallador. No hay forma de refregarlo sin rallar cualquier cosa que utilice.
Pero puede utilizar un cepillo de dientes viejo de cerdas duras. Mójelo y
cepille lo que ha quedado adherido en el interior y en el exterior, de arriba
hacia abajo. Luego lave el rallador y enjuáguelo.
Las paredes de la cocina están manchadas y engrasadas
SI
ES UNA PARED PINTADA, LÁVELA CON UNA SOLUCIÓN DE LAVANDINA. En la mayoría de
las cocinas, las paredes están pintadas. Para limpiarlas, diluya 1⁄2 taza de
lavandina en 4,5 litros de agua y úsela para limpiar las paredes con una
esponja.
Si
eso no funciona, use algún limpiador concentrado que pueda mezclarse con agua y
sirva para desengrasar y desinfectar. Rocíe toda la superficie de la pared,
deje actuar durante diez minutos y limpie con una toalla suave.
SI
TIENE EMPAPELADO, LÁVELO CON AGUA JABONOSA. Las paredes de cocina empapeladas
requieren un tratamiento diferente. Primero pase la aspiradora, de abajo hacia
arriba, con el accesorio con cepillo. Luego verifique que el papel sea lavable.
Busque una mancha escondida y utilice una esponja con una mezcla de agua y
detergente para limpiar suavemente. Si el empapelado no se daña, puede limpiar
toda la pared con agua jabonosa. Enjuáguelo enseguida con una esponja y agua
limpias. Para aquellos empapelados que no pueden lavarse, podrá encontrar en
los comercios limpiadores especiales. Primero pruébelo en una mancha que no esté
a la vista.
El interior del microondas está sucio
HUMEDEZCA
LAS MANCHAS CON VAPOR. Todo lo que necesita para deshacerse de las manchas secas
de comida es agua. Y no necesitará refregar. Simplemente coloque un vaso de
agua en el microondas y caliéntelo durante un minuto, hasta que el interior del
microondas esté lleno de vapor. Luego deje el vaso con agua en el microondas
durante aproximadamente 20 minutos con la puerta cerrada. Al condensarse la humedad
en las paredes, se ablandarán los residuos de comida. Finalmente, limpie los
residuos con una esponja o con papel de cocina. Con esto, se ahorrará una
limpieza trabajosa y también dinero. La mayoría de los limpiadores para hornos
de microondas no son más que bolsas que liberan vapor al calentarse. El vaso
con agua cumplirá el mismo objetivo sin agregar sustancias químicas, residuos
extra ni gastos innecesarios.
La tabla de picar está muy sucia
SI
ES DE MADERA, LÍJELA Y ACÉITELA. Si el agua y el jabón no logran limpiar una
tabla de madera, la lija lo logrará. Use un trozo de papel de lija de grano muy
fino y presione suavemente. No le llevará mucho tiempo lijar toda la
superficie. Finalice con una capa de aceite mineral o de oliva. Esto impedirá
que
la madera se reseque y le dará a la tabla un lustre y un color agradables.
SI
ES DE PLÁSTICO, LÍMPIELA CON LAVANDINA. Si tiene una tabla de picar de
plástico, la mejor opción es rociarla con una solución de agua y lavandina en
partes iguales (use guantes de goma) y luego limpiarla con papel de cocina. La
lavandina no es la mejor opción para las tablas de madera.
La tabla de picar de madera tiene cortes profundos
LÍJELOS
HASTA QUE DESAPAREZCAN. Si la tabla de picar está agrietada, es el momento de
lijarla. Pero, a diferencia del lijado de la superficie para limpieza, para
esta tarea necesitará usar un papel de lija de grano más grueso. Cuanto más
profundas sean las hendiduras, más aspereza necesitará. Lije toda la superficie
de manera uniforme, no sólo las hendiduras. El secreto es usar papel de lija de
grano cada vez más fino a medida que la tabla comience a alisarse. (Cuanto
mayor es el número, más suave es la lija). De este modo, no desgastará la tabla
más de lo necesario. Cuando termine de lijar, cubra con una capa de aceite
mineral o de oliva para evitar que la madera se reseque.