En
su afán por mantener el baño limpio, es posible que haya acumulado un montón de
productos de limpieza bastante costosos. Y es posible que tenga un producto
para limpiar la pileta, otro para los azulejos y otro para quitar el moho de la
cortina de baño. ¡Ya es suficiente! Haga sus propios limpiadores por unos centavos.
Tenga siempre a mano una provisión de bicarbonato, vinagre blanco y alcohol
para derrotar a la suciedad del baño.
Lea los siguientes consejos:
•
Para las zonas pegajosas de la mesada de baño, moje un algodón con un poco de alcohol
y frote las manchas.
•
Para limpiar el inodoro, eche 1/4 de taza de bicarbonato en el agua y deje que
burbujee por unos minutos antes de usar el cepillo de baño y tirar de la
cadena.
•
Otras formas de limpiar un inodoro: espolvoree un sobre de jugo en polvo
dietético en el agua y déjelo reposar por unos minutos. Luego, frote con un
cepillo y tire de la cadena. O pruebe con una pastilla de limpieza para
dentaduras postizas (deje que se disuelva antes de tirar de la cadena) o una
lata de gaseosa (espere unos minutos).
• Limpie los cerámicos del piso del baño con una mezcla de 1 taza de vinagre y 4 tazas de agua tibia.
• Para limpiar las ventanas, mezcle cantidades iguales de agua destilada y vinagre blanco en un rociador plástico. Rocíe el vidrio con la solución y pase un paño o papel de cocina limpios.
Azulejos resplandecientes
Si
quiere ahorrar tiempo en la limpieza, pero igualmente quiere que los azulejos de
la ducha brillen, le encantará esta forma de proteger los azulejos de la ducha
del moho.
Llene
un rociador con lavandina mezclada con agua (1 taza de lavandina con 4 tazas de
agua) y póngalo en el canastito o repisa de la ducha donde guarda el champú.
Una vez por semana, tómese unos minutos después de darse una ducha para rociar
los azulejos con la solución de lavandina. Después enjuague toda la pared con el
duchador. A cambio de esta pequeña inversión de tiempo, sus azulejos lucirán como
nuevos. Pero asegúrese de mantener la solución de lavandina fuera del alcance
de los niños.
Mamparas impolutas
Eliminar los residuos de jabón de las puertas de la ducha es un trabajo largo y laborioso. Pruebe usar cera para muebles con aceite de limón como barrera para evitar que se acumulen. La próxima vez que limpie la puerta, pásele después un trapo suave embebido en aceite para muebles. Deje que el aceite se asiente por dos minutos y luego pase un paño seco para quitar el excedente. La cera para muebles deja una pequeña película oleosa que evitará que el jabón se acumule en el futuro. También es útil usar un secador de ducha (de venta en supermercados y casas de artículos de limpieza) después de cada baño.