La función protectora de los probióticos también es
extensiva a la piel.
Fuente: cuerpomente.com
LOS PROBIÓTICOS ESTIMULAN LA INMUNIDAD DE LA PIEL
Para su análisis, los investigadores del Hospital Rasoul
Akram de Teherán examinaron todos los estudios publicados hasta la fecha sobre
este tema, independientemente de si utilizaban probióticos en forma de cremas o
suplementos dietéticos. Se llegó a la conclusión de que los probióticos
fortalecen las defensas naturales de la piel para que pueda defenderse mejor del acné.
Para los investigadores, resultaron asombrosos los numerosos
mecanismos de acción con los que las bacterias probióticas eran capaces de
contrarrestar el acné. Por un lado, los probióticos forman proteínas antibacterianas
e inhibidores específicos (bacteriocinas) que tienen un efecto inhibidor del
crecimiento de otras bacterias (como las propionibacterias), explica el artículo
de Cuerpomente.com.
Por otro lado, las bacterias probióticas reducen la
hiperqueratosis común en el acné (cornificación en el conducto del sebo) al
tener un efecto positivo sobre las células formadoras de queratinocitos. Además,
los probióticos inhiben las sustancias mensajeras inflamatorias, las citoquinas
IL-8 y TNF-alfa, en las células epiteliales y los queratinocitos, y, por lo tanto,
alivian la inflamación de la piel, que es común en el acné.
LOS PROBIÓTICOS EN LA TERAPIA HOLÍSTICA DEL ACNÉ
Por lo tanto, los probióticos pueden ser una parte
excelente de un enfoque holístico para el acné. También tienen un efecto
beneficioso porque no solo contrarrestan los procesos inflamatorios, sino que
también reducen el estrés oxidativo y regulan el nivel de azúcar en sangre y el
contenido de grasa de la piel.
Tanto un nivel fluctuante de azúcar en la sangre como una producción
excesiva de sebo en la piel se encuentran entre las características del acné y
deben tenerse en cuenta durante la terapia.
CÓMO USAR LOS PROBIÓTICOS
Los probióticos pueden tomarse en forma de cápsula. Sin
embargo, también están disponibles en forma líquida. Ambos se pueden
combinar. Hay que tener en cuenta que no solo la flora intestinal se ve
influenciada positivamente con la ingesta de probióticos, sino también toda la
población de microorganismos (microbiota) que habita en el cuerpo, incluida la
flora de la piel, concluyen los especialistas a cargo de este artículo del sitio
Cuerpomente.com.