Un estudio revela que las medidas para proteger la
fertilidad no aumentan la recurrencia del cáncer de mama.
Casi una de cada diez mujeres afectadas por cáncer de mama
está en edad fértil y corre el riesgo de quedar infértil debido al tratamiento
de quimioterapia. Con la esperanza de poder tener hijos después de completar
el tratamiento del cáncer, muchas mujeres optan por someterse a procedimientos
de preservación de la fertilidad con o sin estimulación hormonal. Estos
métodos incluyen la criopreservación, la congelación de embriones, gametos femeninos
(ovocitos) y tejido ovárico. Es por ello por lo que los científicos del
Karolinska Institutet y el Karolinska University Hospital (Suecia) investigaron
si los procedimientos para la preservación de la fertilidad en relación con un
diagnóstico de cáncer de mama implican un mayor riesgo de recurrencia de la
enfermedad o muerte. El estudio siguió a las mujeres durante cinco años en
promedio. Se trató de 1.275 mujeres en edad fértil que fueron tratadas por
cáncer de mama entre 1994 y 2017 en Suecia. De estas, 425 se sometieron a
procedimientos para la preservación de la fertilidad con o sin estimulación hormonal.
El grupo de control de 850 mujeres recibió tratamiento por cáncer de mama, pero
no se sometió a procedimientos para preservar la fertilidad. La proporción de
mujeres sin recaída tras cinco años fue del 89 % entre las que se sometieron a
estimulación hormonal de los ovarios, del 83 % entre las mujeres con
congelación de tejido ovárico y del 82 % entre las mujeres que no se sometieron
a procedimientos para preservar la fertilidad.
Efectos sobre el tratamiento del cáncer
Cinco años después del tratamiento del cáncer de mama, la
tasa de supervivencia fue del 96 % en el grupo que se sometió a estimulación
hormonal para congelar óvulos o embriones, del 93 % en el grupo que se
sometió a procedimientos de preservación de la fertilidad y que no se sometió a
estimulación hormonal y del 90 % en el grupo que no se sometió a procedimientos
para la preservación de la fertilidad. “No vimos ningún aumento en el riesgo de
recaída o mortalidad cuando se realizaron procedimientos para la preservación
de la fertilidad, en comparación con las mujeres que no se sometieron a
procedimientos para la preservación de la fertilidad. Esta es información
valiosa que puede contribuir a cambiar las rutinas de atención cuando se trata
de mujeres jóvenes con cáncer de mama que desean preservar su fertilidad”, dice
Kenny Rodríguez- Wallberg, profesor adjunto y líder del grupo de investigación
en el Departamento de Oncología y Patología, Instituto Karolinska, y médico
jefe del Hospital Universitario Karolinska.