Reconozca este padecimiento por medio de señales y descubra
cómo puede perjudicar al cerebro.
Su humor y su energía han quedado fuera de combate y
sus pensamientos son tan turbios como el fondo submarino después de una
tormenta. ¿Coincidencia? No. La depresión tiene efectos reales y
mensurables sobre la memoria y la función cognitiva. Buenas noticias: tratarla
puede ayudarlo a recobrar los días de claridad mental, además de
mejorar su estado de ánimo. Si ha estado deprimido, ha sentido las
dificultades que acarrea esta enfermedad: el pensamiento en cámara lenta, la
dificultad para tomar decisiones y los problemas para recordar cosas de todos
los días. La depresión ralentiza la capacidad del cerebro para procesar la
información, anula la habilidad de concentrarse y genera reales problemas de
memoria, todo debido a los cambios que tienen lugar en el cerebro. Cuando
investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington
escanearon los cerebros de 38 mujeres con una depresión de larga data,
vieron algo impactante. Las voluntarias del estudio que habían sufrido por más
tiempo de depresión no tratada —en algunos casos, por más de una década—
habían aumentado un 30% el encogimiento del hipocampo, el área cerebral
responsable de varios tipos de memoria y aprendizaje. Además de matar
las neuronas existentes, la depresión también reduce el nacimiento de nuevas
células. Y disminuye las conexiones entre neuronas que permiten a las
señales de pensamiento ir a toda marcha de una célula a la otra.
Efectos negativos de la depresión
¿El resultado? La dificultad para formar y recuperar
recuerdos. La depresión afecta todo, desde encontrar las llaves del auto
hasta recordar palabras y nombres. En un estudio, se halló que la depresión dificulta
la capacidad de recordar dónde están las cosas. Cuando investigadores
británicos usaron un juego de realidad virtual para comprobar la memoria
espacial de 49 personas, descubrieron que los que estaban deprimidos
rindieron peor que los que no lo estaban. A los voluntarios se les dijo que
navegasen a través de una ciudad virtual en busca de puntos de referencia, como
un cine y una sala de billar. Las personas con depresión encontraron un tercio
menos de sitios que las personas mentalmente sanas. Los autores de un estudio
sobre personas con depresión publicado en la American Journal of Psychiatry
concluyen que cuanto más tiempo permanezca sin tratarse la depresión, mayor
será el daño y más grandes pueden ser los problemas de memoria. La depresión
dificulta seguir los pasos que se comprobó que sirven para tener un
cerebro agudo, como hacer ejercicio, aprender cosas nuevas, vivir nuevas
experiencias, pasar tiempo con los amigos y la familia. En cambio, uno se
refugia y se aísla, una receta de éxito seguro para atontar el pensamiento.
La depresión vuelve difícil el cuidado de la salud, ya que deja la puerta
abierta para afecciones no tratadas que aumentan el riesgo de demencia, como
presión arterial elevada, diabetes y colesterol alto.