Los medicamentos para reducir la acidez, comúnmente
recetados, podrían tener efectos en el desempeño cerebral.
Investigadores del Hospital Universitario de Copenhague y la
Universidad de Aarhus, Dinamarca, han investigado la posible asociación
entre los inhibidores de la bomba de protones (IBP), medicamentos antiácidos
comúnmente utilizados para suprimir la producción de ácido estomacal, y un
mayor riesgo de demencia. Así lo afirman en un estudio dado a conocer hace
pocas semanas, el cual se realizó en una cohorte danesa a nivel nacional de
1.983.785 personas de 60 a 75 años entre 2000 y 2018, y que solo incluyó a
personas sin un diagnóstico previo de demencia o tratamiento con medicamentos específicos
para la demencia.
Jóvenes en alerta
Durante el estudio, 99.384 personas desarrollaron demencia y
469.920 fueron utilizados como grupo de control. El uso de IBP se asoció con
un mayor riesgo de demencia por todas las causas, particularmente entre aquellos
que tenían entre 60 y 69 años en el momento del diagnóstico. El grupo de 60
a 69 años tuvo una tasa de incidencia de 1,25 a 1,59 dependiendo de la duración
del uso y de 1,36 en general para aquellos que alguna vez usaron un IBP.
Riesgo de demencia con IBP
También es posible que los tratamientos con IBP estén creando
una alteración que conduzca a la demencia. El sistema nervioso entérico, células
neuronales incrustadas en las paredes del sistema gastrointestinal, es una
parte esencial de la conexión intestino-cerebro y las alteraciones de uno
pueden afectar al otro. También se han observado correlaciones entre la
enfermedad de Alzheimer y poblaciones específicas de microbiota intestinal,
lo que podría confundir aún más las relaciones causales. Son necesarias más
investigaciones y prudencia en el uso de los IBP.
Correlación de antiácidos con mayor riesgo de demencia
Se observó un riesgo más insignificante en los grupos de
70 a 79 y de 80 a 89 años, con 1,12 y 1,06 por uso, respectivamente. No se
observó una asociación significativa entre el uso de IBP y la demencia en
personas mayores de 89 años en el momento del diagnóstico. La exposición a los
IBP se asoció con una mayor tasa de demencia por todas las causas, que se
produce antes de los 90 años de edad, independientemente de cuándo comenzó el
tratamiento con IBP. Una mayor duración acumulada del uso de IBP arrojó estimaciones
de riesgo más altas.