Este diagnóstico, que cada vez afecta a más adultos, solía
reservarse a los primeros años de la infancia.
Fuente: Medicalnewstoday.com
Las señales y los síntomas comunes de los TEA en adultos
pueden incluir:
1. Dificultad para mantener conversaciones.
2. Dificultad para entablar o mantener amistades cercanas.
3. Incomodidad ante el contacto visual.
4. Problemas para regular emociones.
5. Interés extremo en un tema específico.
6. Monólogos frecuentes sobre el mismo tema o temas.
7. Hipersensibilidad a sonidos o aromas que no
parecen molestar a otros.
8. Producción de sonidos involuntarios, como aclarar la voz
en forma repetitiva.
9. Dificultad para comprender comentarios o expresiones
sarcásticos.
10. Falta de entonación al hablar.
11. Interés limitado solo a unas pocas actividades.
12. Preferencia por las actividades solitarias.
13. Problemas para interpretar las emociones de otros.
14. Problemas para comprender expresiones faciales y
lenguaje corporal.
15. Dependencia de las rutinas diarias y dificultad para
manejar los cambios.
16. Conductas repetitivas.
18. Habilidades superiores en un campo en particular, como
matemática u otras disciplinas. Necesidad de organizar objetos en un orden
específico.
