Medidas tan simples como levantarse y moverse unos pasos lo
ayudarán a reducir el dolor de espalda.
1. Levántese del sofá o de la silla
Si está sentado todo el día, que en sí ya es malo para la
espalda no se está ejercitando. Y esta es la principal estrategia conocida para
prevenir el dolor de la espalda. El ejercicio ayuda a controlar el
peso, fortalece los músculos del abdomen y la espalda que brindan el apoyo
a la columna e incrementa el flujo de sangre oxigenada a los músculos, las vértebras
y otros huesos que mantienen la alineación correcta de la espalda.
2. Mejore su postura
Aunque resulte sorprendente, esto no significa sentarse
derecho. Así que conozca estos consejos para mejorar su postura.
-Duerma de costado o de espaldas, no boca abajo.
Dormir boca abajo incrementa la curva de la espalda, modificando la alineación
normal.
-Párese frente al espejo varias veces por día y
enderécese. Memorice la sensación que le produce que todo su cuerpo forme una
línea (desde la oreja hasta el tobillo).
-Revise su lugar de trabajo. Aún cuando se incline
ligeramente hacía atrás en la silla, debe poder apoyar ambos pies completamenteen el suelo y mantener los ojos a nivel del monitor sin doblar el cuello.
3. Practique pilates o terapia física
No hay evidencia de que uno sea mejor que el otro para la
prevención de futuros episodios de dolor de espalda. Un fisioterapeuta puede
diseñar un programa de ejercicios para usted que solucione sus problemas de flexibilidad y fuerza, lo que ayudará a tener un estilo de vida más activo.
Use una pelota para ejercicios. Un estudio demostró que personas que utilizaron
la pelota mostraron una mejoría importante en la estabilidad vertebral. Los
músculos que desarrollaron en los abdominales y en la espalda empezaron a
funcionar como un cinturón grueso alrededor de la cintura para brindar apoyo a
la columna.
4. Use zapatos bajos
Cuando usa tacos altos, se envía el peso del cuerpo hacía
adelante. Esto exagera la curva de la parte baja de la espalda, y hace que los
músculos trabajen demasiado.
5. No lleve un bolso tan pesado
Los bolsos grandes son prácticos para llevar todo lo
necesario, pero pueden ser desastrosos para su espalda, especialmente si los
lleva sobre un hombro. La mejor opción es una riñonera, que distribuye el
peso uniformemente en las caderas.
6. Use un banquito para alcanzar los lugares altos
Así evitará tener que estirarse demasiado, lo que podría provocar
un desgarro o distensión en la espalda.