Estas son algunas preguntas que no debe dejar de hacerle a
su ginecólogo en los controles.
Fuente: Salud a Diario
1. ¿Debo preocuparme si mis ciclos menstruales son
irregulares?
Los ciclos menstruales son habitualmente irregulares en
los primeros dos o tres años después de la menarquía (primera
menstruación), con variaciones que pueden ir entre 24 y 44 días. Si la
irregularidad persiste, si las menstruaciones están acompañadas de dolor
intenso o si son muy abundantes, es conveniente consultar. Cuando se busca un
embarazo hay que considerar que los ciclos irregulares pueden afectar la
fertilidad, y también es oportuno consultar. Los ciclos vuelven a hacerse
irregulares en el período que precede a la menopausia. Igualmente, es
relevante consultar si los sangrados son muy abundantes o dolorosos, ya que
pueden estar asociados a ciertas patologías del tracto reproductivo.
2. ¿Cuál es el mejor método anticonceptivo?
No hay un método que sea “el” mejor para todas las personas.
El mejor método es el que ella elija de acuerdo a su condición de salud o a su
etapa y estilo de vida. Algunos ejemplos:
• Si una adolescente es sana, puede usar cualquiera de los
métodos disponibles. Sin embargo, es necesario destacar la importancia de usar
un método de alta eficacia en esta etapa de la vida. Si una mujer es hipertensa
o presenta otras patologías cardiovasculares o diabetes con daño orgánico o
daño hepático, no debe usar métodos combinados que contengan estrógeno y
progestágeno, porque tiene mayor riesgo de hacer un accidente cardiovascular o
de agravar su enfermedad.
• La anticoncepción hormonal de emergencia no tiene
contraindicaciones médicas y es posible usarla a cualquier edad o condición de
salud.
• Si una mujer quiere evitar un embarazo por un período
prolongado, puede considerar el uso de un implante anticonceptivo de
progestágeno solo o de un dispositivo intrauterino (DIU). Hay pocas condiciones
de salud que restringen el uso del implante de progestágeno, y únicamente el
cáncer de mama es una contraindicación absoluta.
• Si una mujer presenta sangrados muy abundantes, puede
beneficiarse con el uso de un DIU con levonorgestrel o de un inyectable de
progestina sola, los que inducen una disminución o supresión de dichos
sangrados (amenorrea).
• Si una mujer está en situación de vulnerabilidad social
por drogadicción, un método de largo plazo es la opción recomendada.
• Si una mujer vive en un área rural, alejada de los
servicios y con dificultad para ir a control, puede considerar el uso de un
anticonceptivo de largo plazo.
Las mujeres y las parejas deben saber que los métodos
hormonales, los DIU, la esterilización quirúrgica y la abstinencia periódica no
protegen de las infecciones transmisibles por vía sexual (ITS), incluyendo
la infección por virus papiloma (HPV) y por el virus de la inmunodeficiencia
humana (VIH). Por esto, si existe riesgo de ITS, deben usarse estos métodos
conjuntamente con condón masculino (doble protección).
3. ¿Cuánto tiempo debo dejar las píldoras anticonceptivas
antes de embarazarme?
La fertilidad se recupera en forma muy rápida después de
discontinuar el uso de píldoras anticonceptivas. Seis meses después, el 99
% de las mujeres ya han recuperado los ciclos menstruales. No hay relación
entre tiempo de uso y el intervalo hasta la recuperación de la fertilidad.
4. ¿Qué es la menopausia?, ¿cómo me influye?
La menopausia corresponde a la última menstruación y se
diagnostica en forma retrospectiva, cuando la mujer ha pasado un año sin
menstruaciones. Es la culminación de un proceso fisiológico que empieza
varios años antes, y ya en las mujeres mayores de 35 años se producen numerosos
cambios: hay una disminución progresiva de la fertilidad (a los 40 años, la
probabilidad de embarazo alcanza a un 8 % por mes, versus 20-25 % a los 20
años), aparecen paulatinamente cambios en los sangrados uterinos que se
desordenan o se hacen más abundantes y síntomas asociados primero al exceso y
luego a la disminución de estrógenos. Puede haber dolor de las mamas, síntomas
vasomotores (sofocos), trastornos del ánimo, molestias articulares y pérdida de
hueso y signos como atrofia urogenital. Cabe destacar que esto no ocurre en
todas las mujeres, y muchas viven este período sin, o con pocas, molestias. Es
recomendable el control periódico de salud en esta etapa, para asegurar el
diagnóstico precoz de enfermedades que aparecen con la edad. Especialmente:
cáncer de mama, cuello uterino y vesícula biliar, y de patologías
cardiovasculares. También para evaluar el uso de terapia hormonal de reemplazo.
5. ¿Cuáles son las infecciones de transmisión sexual más
comunes y cómo puedo evitarlas?
Las Infecciones de Transmisión Sexual (ITS son
infecciones que se transmiten de persona a persona a través del contacto sexual
íntimo; es decir, a través de relaciones sexuales vaginales, anales u orales.
Hombres y mujeres pueden contraer las ITS sin importar la edad si se tienen
relaciones sexuales sin protección con personas infectadas. Algunas de estas
infecciones también se contagian por uso de transfusiones con sangre
contaminada, material cortopunzante contaminado (agujas, piercing), desde una
madre a su hijo/a durante el embarazo, el parto o la lactancia, o a través de
la piel. Las ITS son causadas por bacterias, virus, parásitos y hongos.
Actualmente, se conocen alrededor de 30 tipos de ITS diferentes. Pueden afectar
a la persona repetidamente porque no producen inmunidad, y solo hay vacunas
contra la hepatitis B y el virus papiloma humano Afectan de preferencia a
población joven (entre 18 a 50 años). La promiscuidad sexual, y la drogadicción
endovenosa son factores de riesgo. Las personas afectadas por una ITS son
más vulnerables a contraer el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).
6. ¿Cómo afectan específicamente a las mujeres?
Las ITS pueden provocar diferentes enfermedades en las
mujeres (vulvitis, vaginitis, cervicitis, uretritis, vaginosis bacteriana,
verrugas genitales, proceso inflamatorio pelviano, infertilidad, embarazo
ectópico, SIDA) y en los hombres (uretritis, epididimitis, proctitis, úlceras
genitales, hepatitis, artritis aguda, enterocolitis, SIDA). También causan
complicaciones graves del embarazo, patología fetal y pueden ser causa de
muerte.
7. ¿El uso de condones por los hombres sirve para
prevenirlas?
Los condones masculinos, usados en forma correcta y
consistente, son el método más efectivo para prevenir las ITS,
especialmente sífilis, gonorrea, clamidia, tricomonas y el VIH, en parejas
sexualmente activas. También ofrece cierta protección contra la transmisión
genital del virus del papiloma humano (VPH) y del virus de herpes simple (VHS),
pero no de la transmisión de piel a piel de estas infecciones. La prevención de
las ITS disminuye la probabilidad de desarrollar una enfermedad pélvica
inflamatoria y sus secuelas más frecuentes e importantes. Tanto hombres como
mujeres deben aprender el uso correcto del condón masculino y recibir
orientación para negociar su uso. Para prevenir las ITS, es muy importante
integrar información y educación, especialmente cuando se trata
adolescentes, quienes son particularmente vulnerables a los riesgos del sexo
sin protección. También es importante llegar a los hombres ya que su
participación en la prevención de ITS/VIH es crucial.
8. ¿Qué se entiende por una vida sexual segura?
Una vida sexual segura es aquella en que la persona puede
disfrutar de una sexualidad placentera sin riesgo de un embarazo no deseado,
sin contraer infecciones ni enfermedades y sin ser víctima de violencia.
Habitualmente se ha hecho un énfasis especial en la protección contra embarazo
no deseado e ITS/ VIH, dada la alta frecuencia con que ocurren estas
situaciones, pero el tema de violencia contra las mujeres ha surgido con fuerza
en los últimos años. Es importante recordar que la salud sexual y reproductiva
(SSR) es uno de los ámbitos en los que se expresan con mayor fuerza las des-
igualdades e inequidades de género. Por esto, en una vida sexual segura se
reconocen los derechos de cada participante, en particular de las mujeres, a
expresarse, a proteger su salud, a decidir con plena libertad de conciencia y a
mantener su autonomía y su propio proyecto de vida sin presiones indebidas por
parte de la pareja.
9. ¿Cuáles son los aspectos más importantes de la higiene
intima?
Y ¿cuál es la manera correcta de realizarla? Desde muy
niña el aseo genital es solo con agua, debe limpiarse todos los repliegues de
vulva, y con jabón se limpia el pliegue interglúteo para dejar sin restos de
deposiciones la zona. El aseo con el papel toilette siempre debe ir desde
genitales hacia ano, para no contaminar con deposiciones la vagina ni el meato
urinario.
10. ¿Qué son las infecciones urinarias?
Son infecciones que se producen en cualquier parte del
sistema urinario: uretra, vejiga, uréteres, pelvis renal y los riñones. La
mayoría de estas ocurre en las vías urinarias inferiores (la vejiga y la
uretra), sin embargo, pueden ascender y causar daños serios.
11. ¿Cómo evitarlas?
Hay que mantener buena higiene, tratar la estitiquez, tomar
mucho líquido y orinar frecuentemente. Consultar a un especialista, nunca automedicarse.
12. ¿Debería pedir exámenes médicos antes de iniciar
relaciones con una pareja sexual?
Puede ser una buena medida, asimismo el uso consistente de
condón.
13. ¿Qué exámenes específicos debería pedirle?
Ambos deben tomarse exámenes de ITS en sangre y de
secreciones vaginales en la mu- jer y uretrales en el hombre.
14. ¿La nutrición afecta mi fertilidad?
Sí, tanto la delgadez extrema como la obesidad pueden
generar alteraciones del ciclo menstrual, lo que explica la disminución de
ciclos ovulatorios, y la disminución de la fertilidad de la mujer.