¿Duerme
mucho o poco? Si no está seguro, aquí encontrará la respuesta.
Fuente:
www.sleep.org
Las
recomendaciones sobre cuántas horas debe dormir una persona en un
período de 24 horas varían de acuerdo a la edad del individuo. Según las
principales organizaciones dedicadas a la investigación del sueño en los
Estados Unidos, como la National Sleep Foundation, la American Academy of Sleep
Medicine y la Sleep Research Society, las necesidades cambian según se trate
de recién nacidos, niños, adolescentes y adultos. Para niños pequeños, la
cantidad total de horas de sueño necesarias contempla siestas durante el día.
¿Cómo cambian las necesidades de descanso según la edad?
Muchos
creen que pueden trasnochar permanentemente o no priorizar el descanso durante
la juventud. Sin embargo, el sueño es un componente esencial de la salud
física y el bienestar mental, independientemente de la edad. Los
adolescentes y los adultos jóvenes son tan vulnerables a los efectos de la
falta de sueño como los adultos mayores. A medida que pasa el tiempo,
probablemente haya notado que comienza a experimentar modificaciones en la
manera de dormir. El artículo del portal Sleep.org enumera algunos de los cambios
más significativos en los patrones de sueño que se presentan con la
edad: Comienza a sentirse cansado más temprano al anochecer. Se despierta más
temprano por la mañana. El período de sueño se reduce durante la noche. Duerme
más siestas durante el día. Se despierta con más frecuencia durante la noche. Pasa
más tiempo despierto durante la noche.
Patrones de descanso según la edad
La
cantidad de horas que necesita dormir en un período de 24 horas para un
óptimo estado de salud son aproximadamente las mismas a los 20 años que a los
80. Existe una concepción errónea acerca de que necesitamos muchas menos horas
de sueño a medida que envejecemos, pero los adultos mayores de 60 años aún
precisan entre siete y ocho horas de descanso. ¿Son suficientes siete horas de
sueño? Dormir siete horas todas las noches representa el nivel más bajo de las
recomendaciones de los expertos, pero aun así se encuentra dentro del rango
saludable. Tenga presente que todos somos diferentes y que la genética puede desempeñar un importante rol en nuestra respuesta individual al sueño. Mientras
que algunas personas pueden sentirse completamente descansadas al cabo de siete
horas de sueño, otros pueden necesitar un período de nueve horas. Además,
considere que siete horas es la cantidad mínima de horas de sueño
recomendadas. Para lograr completar esas siete horas de sueño,
probablemente deba pasar un poco más de tiempo en la cama para así compensar lo
que demora en dormirse y cualquier despertar nocturno. ¿Es posible compensar
la falta de descanso? Dormir más los fines de semana es una estrategia válida
para compensar el descanso perdido durante la semana de trabajo. Este enfoque
hasta puede mejorar los índices de mortalidad respecto de un déficit de descanso
sostenido tanto en días laborales como fines de semana. Pero si bien usar los fines
de semana para ponerse al día con la deuda de sueño es mejor que nunca
compensar el descanso perdido, esta práctica puede igualmente tener efectos
negativos en el organismo. La opción más saludable es cumplir con la
cantidad recomendada de horas de sueño en cada período de 24 horas. Si
tiene problemas para dormir a la noche, también puede realizar pequeñas siestas
para obtener una inyección de energía más inmediata durante la semana. Estos
trucos, sin embargo, pueden no resultar suficientes para contrarrestar los efectos
de la falta de descanso crónico. Necesitará, entonces, desarrollar un plan para
mejorar la calidad y la cantidad de descanso en el largo plazo.