Si la hora del baño es una lucha, con estas ideas le
resultará más fácil hacer que sus hijos se bañen.
Fuente: Kidsit.com
1. BAÑO DE BURBUJAS
Las burbujas son un excelente recurso para distraer a los
niños con algo divertido e interesante. Las burbujas suelen captar su
atención a tal punto que es probable que no sea necesario ningún otro juguete. Además,
las burbujas ayudan a invisibilizar cualquier otra cosa que haya en el agua que
pueda causarles inquietud.
Para aquellos niños que tienen miedo de la rejilla del
drenaje, las burbujas son ideales para tapar esta área. Además, les
proporciona algo de privacidad a los niños que puedan sentirse incómodos por
estar desnudos frente a otra persona.
Los niños, a veces, tienen miedo de alguna mancha que pueda haber
en la bañera o de pequeñas partículas oscuras sueltas en el agua causadas por
acumulación de minerales en los caños que conectan las canillas; a veces,
piensan que esas partículas son bichos y se asustan al pensar que pueden picarlos.
Entonces, usar un baño de burbujas para disimular estas
cuestiones puede ser buena idea. Asegúrese siempre de usar productos que no causen
irritación en la piel del niño, especialmente, en las niñas si utiliza mucha
cantidad.
2. OFRÉZCALES LA OPCIÓN DE DUCHARSE
Para niños más grandes e independientes que se rehúsan a
bañarse, en lugar de un baño de inmersión, ofrézcales una ducha. Si son
suficientemente grandes para lavarse solos el cabello y enjabonarse el cuerpo,
ni siquiera es necesario que esté en el baño para ayudarlos. Tal vez se sientan
más grandes y maduros al darse una ducha o, simplemente, les parezca que
sentarse en una bañera es desagradable o muchas otras razones que se les pueden
ir ocurriendo a medida que crecen. Entonces, si ducharse puede evitar discusiones
y molestias, permítales hacerlo.