Si se siente incómodo cada vez que debe quitarse los
zapatos, le presentamos soluciones al problema de la transpiración en los pies.
FUENTE: Salud a Diario
Esta condición puede afectar a cualquier persona que pasa
mucho tiempo de pie, con un calzado que no permite eliminar la transpiración.
Algunos remedios de la alacena, que eliminan el olor, harán que pronto los pies
vuelvan a ser dignos de exponerse en público.
Normas de higiene para los pies
Siga estas normas básicas de higiene para los pies y
nunca volverá a preocuparse por el mal olor.
• Lave los pies regularmente con agua jabonosa tibia,
utilizando un jabón desodorizante.
• Con frecuencia, deje los pies expuestos al aire,
esto facilitará la evaporación del sudor.
• Ventile los zapatos después de cada uso para
inhibir la formación de moho.
• Espolvoree el interior del calzado con bicarbonato de sodio.
• Cambie de zapatos día por medio para permitir que la
humedad acumulada se seque completamente.
• Use medias de algodón, que absorben la humedad
mejor que las de fibra sintética.
Remedios naturales para pies que sudan
Neutralice el olor con vinagre. Remoje los pies en
una solución de aproximadamente 1/3 de taza de vinagre de manzana en una
palangana llena de agua tibia o fresca. El ácido del vinagre neutralizará los
olores.
Use almidón como talco. El almidón de maíz absorbe
la transpiración. Todos los días, una o dos veces, espolvoree almidón de
maíz sobre los pies antes de ponerse las medias. No lo use si tiene
lastimaduras o heridas abiertas.
Pruebe un baño de pies con té negro. Hierva dos
saquitos de té en ½ litro de agua durante 15 minutos. Retire los saquitos y
diluya la infusión con dos litros de agua. Si es necesario, deje enfriar hasta
que se entibie la mezcla. Después remoje los pies de 15 a 30 minutos. Repita
diariamente. El ácido tánico presente en el té preparado fuerte mata las
bacterias y cierra los poros, lo cual hace que los pies transpiren menos.
Frótese con aceite fragante. El aceite de lavanda
no solo huele bien, sino que también mata las bacterias. Todas las noches,
antes de dormir, frote los pies con unas gotas y masajee para que el aceite
penetre; después, cubra los pies con medias.
Trate los pies con sal. Mezcle dos tazas de sal
inglesa en un balde o palangana con unos 7,5 litros de agua tibia. Remoje los
pies 15 minutos, dos veces por día. La sal inglesa actúa como astringente para
reducir la sudoración, y también mata bacterias.
Pruebe una pomada antibiótica. El sudor en sí mismo
no tiene olor; solo comienza a notarse cuando interactúa con las bacterias,
como ocurre con la transpiración de las axilas. ¿Entonces, cómo se matan las
bacterias? Algunos gurús de los remedios caseros indican que antes de ir a la
cama hay que frotarse los pies y las uñas de los pies con una fina capa de
alguna pomada con antibiótico, después ponerse medias y meterse en la cama. Por
la mañana, las bacterias habrán desaparecido y, con ellas, los problemas de
olor en los pies.
Complemente con zinc. Algunos especialistas sugieren
que agregar zinc a la dieta ayuda a eliminar los problemas de mal olor. Entre
las principales fuentes de este mineral están los porotos, avena, cereales fortificados para el desayuno, almendras y castañas de cajú.