¿Tiene una huerta con hierbas y quiere saber cuál es el
mejor momento para recogerlas? No se pierda estos trucos para aprovechar las
hierbas al máximo.
Use la parte correcta
Las características químicas de las distintas partes de cada
planta varían, y por ende tienen diferentes efectos en el organismo. Por
ejemplo, tal como las hojas y semillas de cilantro aportan diferentes
características a una receta, así también las hojas y raíces de diente de león
tienen distintos efectos medicinales.
Antes de cosechar una planta por razones culinarias o
medicinales, revise bien qué parte de la planta necesita. Cometer un error
puede traer graves consecuencias; por ejemplo, la corteza de un arbusto llamado
sauquillo o viburno (Viburnum opulus) es una medicina muy útil, pero sus
bayas son tóxicas y no se deben comer.
Cosecha y secado de hierbas
Las hierbas recién cortadas añaden un toque de sabor
a los platos y aumentan la frescura de los tés herbales. Pero, la mayoría de
las veces, querrá secar su cosecha de hierbas para tenerlas a mano
cuando las necesite, sin importar la estación.
Al guardarlas en frascos de vidrio etiquetados, en un
lugar fresco y oscuro, la mayoría de las hierbas duran hasta un año.
Identificación al cosechar las hierbas
Por el lado de la seguridad, no hay nada más importante que
asegurarse de cosechar una hierba sólo si está convencido de saber de cuál se
trata. Esto es muy sencillo en su propio jardín, pero puede volverse delicado
si usted recoge plantas que no sembró personalmente.
Una vez secas las plantas, se vuelve incluso más difícil
identificarlas, así que coseche y seque una hierba a la vez, para evitar
que se mezclen distintos grupos de plantas; siempre márquelas o etiquételas
inmediatamente, para poder distinguirlas.
Equipo para cosechar hierbas
La mayor parte del equipo que necesita para cosechar
hierbas consiste en artículos cotidianos del hogar.
1. Tijeras afiladas, de podar, o cuchillo de jardín
Ayude a prevenir daños en la planta usando siempre una hoja afilada.
2. Guantes. Protéjase las manos de espinas, cerdas y
reacciones alérgicas usando unos guantes para jardinería de buena calidad.
3. Canasta. Si es posible, junte las hierbas en una
bandeja o canasta plana y poco profunda, para extender las muestras en vez de apilarlas.
Evite usar bolsas que limiten la circulación de aire o mezclen diversas
hierbas.
4. Horquilla. Úsela para sacar las raíces, en vez de
una pala; es menos probable que dañe la planta.
5. Cuerda. Ate los ramos de hierbas con cuerda.
6. Etiquetas. Mientras más pronto catalogue las
hierbas cortadas o secas, menos probable será que olvide de cuáles se tratan.
7. Bolsas de papel. Úselas para recoger semillas, y
recuerde catalogar su contenido.
8. Rejilla o bandeja. Las hierbas se secan mejor
cuando hay buena circulación de aire; una rejilla para horno o pastel es
perfecta. También puede extender una malla metálica sobre un bastidor.
8. Frascos. El vidrio es hermético y a prueba de
humedad, perfecto para guardar hierbas secas. Si nota condensación en el
frasco, quizá las hierbas no estén bien secas; sáquelas y déjelas secar antes
de guardarlas otra vez.