Tras casi dos años de
pandemia, ¿estamos cerca de que el COVID-19 se vuelva una enfermedad endémica?
Los investigadores de la
Escuela Columbia Mailman, Jeffrey Shaman y Marta Galanti, en un artículo
aparecido en la revista Science, a mediados de octubre, exploraron un
escenario potencial en el que la inmunidad al SARS-CoV-2, ya sea a través de
una infección o una vacuna, disminuya en un año, y llegue a una tasa similar a
la observada para el betacoronavirus endémico que causa una enfermedad respiratoria leve. El resultado, auguran, serían brotes anuales de COVID-19.
Por otro lado, si la inmunidad al SARS-CoV-2 fuera más prolongada, tal vez a
través de la protección proporcionada por la respuesta inmune a la infección con otros coronavirus endémicos, podríamos experimentar lo que inicialmente parecería
ser una eliminación de COVID-19, seguida de un resurgimiento después de unos
años.
Hay tres factores importantes a considerar, dicen:
Reinfección Entre los que han sido infectados con COVID-19, los estudios
serológicos indican que la mayoría de las infecciones, independientemente de la
gravedad, inducen el desarrollo de algunos anticuerpos específicos del
SARS-CoV-2. Sin embargo, no está claro si esos anticuerpos son en sí mismos
suficientes para proporcionar “inmunidad esterilizante” a largo plazo para
prevenir la reinfección.
Co-infección La respuesta inmune al SARS-CoV-2 puede verse afectada por si
alguien fue infectado o no, recientemente, con otro virus. Muchos estudios
previos a la pandemia muestran que la infección por un virus puede brindar
protección a corto plazo, aproximadamente una semana, contra una segunda infección.
Otros estudios confirman que las infecciones por virus respiratorios
simultáneos no se asocian con una mayor gravedad de la enfermedad. Si bien se
han documentado algunas coinfecciones por SARS-CoV-2, incluidas las
coinfecciones con influenza y virus sincitial respiratorio, no hay datos
suficientes para sacar conclusiones.
Estacionalidad La evidencia
sugiere que COVID-19 podría ser más transmisible durante el invierno. Fuera de los trópicos, muchos virus respiratorios comunes resurgen
estacionalmente durante determinadas épocas del año. Todos los coronavirus
endémicos (OC43, HKU1, NL63, 229E) presentan estacionalidad en regiones
templadas similar a la influenza. De manera similar, las condiciones
ambientales también pueden modular la transmisibilidad del SARS-CoV-2, lo que
no es suficiente para evitar la transmisión durante las primeras etapas de la
pandemia cuando la inmunidad es generalmente baja, pero quizás lo suficiente
para favorecer la transmisión estacional recurrente durante el invierno en las
regiones templadas, similar a la influenza