Algunos consejos para tener una buena rutina de ejercicios,
que pueda realizar en su día a día.
1. Haga ejercicio en cuanto se levante.
No lo piense mucho. Solo salte de la cama, póngase las
zapatillas, inhale y ¡fuera! Es más probable que haga ejercicio en la mañana,
según muestran los estudios. Y un beneficio adicional es que así dormirá mejor.
2.Tome en cuenta el ambiente.
Evite caminar o correr cerca de avenidas principales, o
durante las horas pico. Ya que no es bueno respirar el esmog del tránsito.
También tenga en cuenta que cuando camine, corra o ande en bici por la noche,
deberá usar ropa reflejante de modo que puedan verlo fácilmente.
3.Tenga la mentalidad correcta.
Empiece a hacer ejercicio poco a poco y auméntelo
gradualmente. Su cuerpo deberá irse acostumbrando a una nueva rutina. No se
frustre, cada uno avanza a su propio ritmo y no se preocupe si parece progresar
más lentamente de lo que le gustaría. Su cuerpo le dirá cuando es el momento de
dar el próximo paso. Si necesita ánimo, pida a un amigo que lo acompañe a hacer ejercicio con usted. Programar los encuentros con alguien para ir a
una sesión de ejercicio hará más difícil que quiera dejarlo cuando no tenga
ganas.
4.Beba un vaso de jugo de cereza antes del ejercicio.
¿Quién hubiera creído que un vaso de un jugo rojo sería tan
importante en lo que respecta a la fuerza muscular? Pero eso es lo que
investigadores de la Universidad de Vermont en Burlington hallaron cuando les
pidieron a 14 voluntarios que bebieran 2 veces diarias, 3 días antes del
ejercicio y 4 días posteriores a este, jugo de cereza natural mezclado con jugo
de manzana comercial o una combinación que no tuviera jugo de cereza. Quienes
tomaron el jugo de cereza experimentaron menos dolor y perdieron mucha menos
masa muscular en los días posteriores al ejercicio (4% frente a 22%). El
grupo del jugo de cereza afirmó que el dolor muscular llegó a su cima 24 horas
después del ejercicio, mientras que el otro grupo experimentó dolor el doble de
tiempo. Los investigadores creen que la alta concentración de compuestos
antioxidantes y antiinflamatorios del jugo de cereza explica todos sus
beneficios.
5. Mantenga una postura correcta.
Los expertos sostienen que al esforzarse por mantenerse
erguido (con una postura un poco arrogante) se contraen docenas de músculos
desde las piernas hasta el cuello, con lo que se queman calorías y
reafirman los músculos. Cuando planche, lave los platos y esté parado en la
fila del banco, concéntrese y mantenga una postura adecuada, con las rodillas
apenas flexionadas, el pecho abierto (enderezándose, no encorvándose) y los
hombros erguidos. Un buen ejercicio es imaginar que sostiene un lápiz entre los
omóplatos y que, para que no se caiga, debe apretarlos. No va a pasar mucho
tiempo antes de que se empiecen a cansar los músculos de su espalda. Para
“reajustar” la postura, siéntese o párese como si quisiera parecer más alto,
nunca se jorobe, y así estará ejercitando los músculos de la espalda y del
pecho.
6.Camine para controlar su peso.
¿No cree que esta moderada actividad pueda ayudar? En un
estudio riguroso, se le pidió a un grupo de personas sedentarias que caminaran
todos los días 10,000 pasos a buen ritmo, medidos con podómetros. El estado
físico, la presión arterial y el nivel de grasa en el cuerpo de todos mejoraron
tanto como los de un grupo que siguió un programa aeróbico tradicional en un
gimnasio. En conclusión, caminar de 8.000 a 10.000 pasos diarios (unos 8
km) ayuda a bajar de peso y, si se suman otros 2.000 pasos (1.6 km) diarios, a
mantenerse.