Raíz utilizada desde tiempos ancestrales, el ginseng sigue
vigente en la actualidad por sus propiedades.
Orígenes del ginseng
La raíz del ginseng se viene utilizando en China
ininterrumpidamente desde hace más de 4.000 años, por sus propiedades
tonificantes. 4 En 1711, el jesuita Pierre Jartoux lo descubrió en el patio
del emperador, en Pekin, y se introdujo definitivamente en Europa a partir del
siglo XVIII. Desde esa época, ha sido objeto de numerosos estudios científicos
por sus extraordinarias virtudes. En la actualidad, el ginseng es quizá la
planta medicinal más popular en todo el mundo.
La palabra deriva del término chino Jen-Shen, que significa
“formado como un hombre”, en referencia a su semejanza a la forma humana. El
nombre indio americano para la planta, Garantoquen, tiene el mismo significado.
La raíz también se llegó a comparar con los genitales masculinos. Por eso se
le adjudica eficacia para tratar la impotencia y la esterilidad.
Aunque existe más de un tipo de ginseng, los más conocidos
son el americano, el coreano (también llamado asiático) y el siberiano. Los dos
primeros son los considerados “verdaderos” porque provienen de un género de
plantas denominadas Panax.
El Panax quinquefolius crece principalmente en América y el
Panax ginseng, crece especialmente en Asia. El conocido como ginseng Siberiano
o Eleuterococo es de la misma familia, pero de un género diferente (Eleutheroscoccus
senticosus) y tiene distintos principios activos; de ahí que no se pueda considerar
la misma planta medicinal.
Desde que, en 1854, el científico e investigador
Garriques encontró una saponina llamada pan aquilón en la raíz del ginseng,
se han efectuado miles de estudios sobre esta raíz encontrándose ácidos orgánicos,
carbohidratos, aminoácidos, ciertas vitaminas, minerales, aceites esenciales,
fitoestrógenos y enzimas, que estimulan diferentes partes del cuerpo (tono muscular,
metabolismo, glándulas endocrinas, sistema nervioso…).
Cuándo no debe tomar ginseng
El ginseng contiene pequeñas cantidades de fitoestrógenos,
con acción similar a los estrógenos (hormonas sexuales femeninas), por lo
que es recomendable que, especialmente las mujeres, no abusen de su consumo. Existen
formas comerciales que contienen alcohol etílico en su composición, las
cuales no deben ser administradas a niños pequeños ni a quienes se encuentran
en proceso de abandonar el alcoholismo. Por su efecto vasoconstrictor,
no es recomendable para personas que padecen de hipertensión arterial; y dado
que no existen datos sobre la seguridad del ginseng en niños o en mujeres
embarazadas, se sugiere no consumirlo en ninguno de estos dos casos.
También debe tenerse en cuenta que el ginseng interactúa
con determinados medicamentos, por lo que antes de comenzar el tratamiento,
es necesario consultar con el médico.
Cuándo debe tomar ginseng
Las indicaciones para el uso del ginseng son las
siguientes:
Agotamiento físico: astenia (debilidad), fatiga
fácil, falta de energía vital, convalecencia de enfermedades u operaciones.
Entrenamiento deportivo: el ginseng no figura en la
lista de sustancias prohibidas por producir doping.
Estrés, enfermedades psicosomáticas (gastritis,
colitis, jaquecas, asma, palpitaciones…).
Agotamiento psíquico, depresión, ansiedad, insomnio.
Muy útil para los estudiantes en época de exámenes.
Envejecimiento precoz, senilidad.
Hipotensión arterial.
Anemia: especialmente útil para recuperar las pérdidas de
sangre tras hemorragias o donaciones.